martes, julio 5

Recomendación: cine magnífico y barato

Nos reíamos cuando nos enteramos de que la gente de publicidad le decía "películas" a los rodajes de avisos, y ahora esa risa se ha vuelto contra nosotros, porque resulta evidente que ya es exactamente lo mismo, que el cine está estructurado como un aviso, un relato que persigue a su público en lugar de guiarlo, una cinta sin fin que dice siempre lo mismo, nada; basta conseguir algún dvd con escenas extra, esa especie de pistas del crimen dejadas intencionalmente, para comprobar que la elección de los directores es siempre la que conforma a la construcción del bestseller, más allá del éxito potencial de la película.

Bien, estoy generalizando, porque al menos hay una prueba en contrario: Julien Donkey Boy, de Harmony Korine.

Tuve la fortuna de verla hace años en otro ispa y cometí la estupidez de no avisar de su proyección el sábado pasado en el nuestro. Espero enmendar este error recomendando, rogando encarecidamente a los que tienen algún interés en el cine, que vayan este sábado 9 a verla a la Sala 18 de Cinemateca, que ya está en pleno Festival de Invierno.

Cuando la ví, pensé que una película tan extrema jamás iba a poder proyectarse aquí. Yo creo que es una película grandiosa, pero puedo aceptar argumentos en contra; lo que nadie que la haya visto podrá negar es que es un gesto inmenso. Para mí, es la llegada, cien años después que en las artes, de una verdadera vanguardia al cine.

No pienso arruinarla intentando contar su argumento, y les aviso que todo lo que lean por allí sobre esta peli está equivocado, no por imposibilidad de describirla, sino por miedo a nombrar lo que la película llama. Sí puedo decir algunas ideas sueltas: que la película tiene una consistencia entre forma y contenido abrumadora -abandonad toda esperanza de que después de unos minutos el pixelado vaya normalizarse o de que los ojos vayan a acostumbrarse-, que deja a Todd Solondz como a una novicia rebelde, que Dogma no tiene nada que ver, que tampoco es basura conceptual, que para los vejetes aparece el inmenso Werner Herzog en un personaje inmortal, que por favor no vayan a levantarse antes del final, que es una PELI.

Ite, id, vayan. La recomiendo de corazón. Vayan aunque sea para odiar para siempre al choto de Sigmur. Al choto exagerado.


- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -
Balbuceo anti-telépatas: GT400 (Michelle Gun Elephant)