martes, noviembre 30

El semanterio propio



A veces el enterrador es uno. Hace unos días escuché el siguiente diálogo entre empleados del Supermercadito Rivera:

-¿Tenés pronto el pedido?
-Pará que corroboro
Ni mis amigos ni yo usamos 'corroborar': preferimos 'chequear' todo. Cuántas amorfidades que produce esa adaptación apurada del inglés: chequeo, chequ, chequ, ¡checaste! Olvidamos la forma castellana que se ajusta cómodamente a casi todas las ocurrencias de 'chequear'. Afortunadamente la forma noble se mantiene, por lo menos, en el sociolecto de gente que supongo menos expuesta al downloading, al publishing, al mastering, al marketing de palabras.